Normalmente vamos por las escaleras mecánicas: fácil, te subes y ya. Cuando se estropean y las ves enrolladas sobre sí mismas es como cuando la vida se te hace bola y te enrocas y divagas en círculos. Al final decides ir por las escaleras normales, es sólo un poquito más de esfuerzo, seguro que en el siguiente tramo ya están arregladas las mecánicas (o en los cinco siguientes tramos, si vas por Cuatro Caminos). Y luego, hay momentos en los que en la vida vas rápido de más y te sientes como en las escaleras mecánicas planas que generalmente llevan al aeropuerto.
Gracias estación de Cuatro Caminos. Siempre que he pasado por ti he visto escaleras normales, mecánicas que funcionan y mecánicas estropeadas. Ralentizas la vida de los usuarios de metro y nos invitas a que pensemos mientras te recorremos, seguro que, aunque te las merecerías, no te gustaría que te pusieran las escaleras planas mecánicas, demasiado rápido y fácil para ti.
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